pero no sabe por dónde empezar. El ISO 14001 podría ser un buen inicio, ya que este establece los requisitos para un sis- tema de gestión ambiental efectivo. Contar con certificaciones e iniciativas ambientales hoy se ha convertido en una ventaja competitiva, basta ver los números de una reciente encuesta que destaca que en el perfil de los nuevos consumidores el compromiso con el medio ambiente y la elección por las marcas sustentables. De acuerdo con el GloabalWebindex, seis de cada 10 millennials optaron por productos ecológicos y sostenibles, 58% de la Generación Z y el 55% de la X tam- bién lo haría, mientras que el 46% de los Baby Boomers mostraron una in- clinación de incrementar el gasto por productos más ecofriendly . Y ahora, dejando a un lado el factor Taylor, y aterrizando un poco a la reali- dad, hablemos de Apple, se estima que el 71% de sus ingresos provienen de fuentes sostenibles y hoy encabeza la
lista de empresas con ingresos soste- nibles, US$259 millones gracias a sus iniciativas ambientales. Pero a la pregunta del millón, ¿podría Taylor ser más amigable con el medio ambiente?, Sí, sí podría, al adoptar el ISO 14001 e implementar procesos más ecológicos en sus giras y desplazamien- tos, reduciendo su huella de carbono y fomentando prácticas más sostenibles. Esto podría implicar una mejor plani- ficación de sus viajes, la optimización de sus recursos y la compensación de emisiones de carbono. En resumen, la implementación del ISO 14001 podría convertirse en una herramienta valiosa para Taylor Swift, muchas empresas, para nuestro país y otras celebridades que buscan reducir su impacto ambiental y contribuir a un futuro más sostenible. Es un recordato- rio de que la responsabilidad ambien- tal no conoce fronteras, incluso en el mundo de la música, el espectáculo y por supuesto es tarea de todos.
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