Sin embargo, considerando que los servicios de salud se vuelven muy pre- ciados para muchas personas es im- portante agregar un diferenciador in- novador y tecnológico que permita dejar de ver a los clientes como simples consumidores y se les vea como benefi- ciarios de servicios médicos. Este pun- to es clave para que, como empresa, se refleje el compromiso de garantizar un producto y servicio de calidad por el que muchos estén dispuestos a invertir de forma proactiva. En este contexto, es importante tener presente tres elementos que pueden ayudar a garantizar que el servicio que ofrecemos cubre la demanda del mer- cado, los cuales se dividen en: accesibi- lidad, personalización e innovación. En primera instancia, la búsqueda de ser- vicios médicos accesibles y confiables, aunado a la falta de tiempo y disponibi- lidad para trasladarse a una cita médi- ca, son factores que llevan al paciente a buscar servicios de salud y diagnósticos rápidos, por lo que el uso de recursos como la atención médica virtual pueden ser la respuesta y diferenciador en nues- tro portafolio de servicios. Resulta interesante ver cómo en EUA el mercado de salud y bienestar ha crecido hasta en casi mil millones de dólares , como resultado del aumen- to del gasto en la atención médica de bolsillo y bienestar personal. Esto refle- ja que la gente cada vez gasta más en salud y lo que buscan es que ésta no desbalancee sus finanzas, por lo que quienes inviertan su dinero y esfuerzo para hacer que sus servicios sean más accesibles, indiscutiblemente tendrán un crecimiento importante durante los próximos años, sobre todo consideran- do que, a mayor tecnología, mayor de- manda de servicios más eficientes. En resumen, la necesidad de una atención a la medida es un factor que muchos aprecian y suele ser decisivo a la hora de adquirir un servicio.
Por otro lado, el uso de datos de ci- clo vital entre nuestros consumidores puede favorecer una mejor calidad de los servicios médicos. Es decir, la recolección de información sanitaria a lo largo de la vida de un individuo ayuda a generar una agenda con an- tecedentes genéticos y factores am- bientales que nos ayudan a generar tratamientos personalizados y medi- das preventivas para responder con mayor precisión a las necesidades in- dividuales de cada cliente a futuro. Finalmente, al igual que ha ocurrido en otros campos, el desarrollo de la inteli- gencia artificial (IA) puede constituir una herramienta que facilite aún más el ofrecimiento de los diferentes servicios de atención médica. El uso de esta inno- vación tecnológica junto con la cadena de bloques y un equipo humano que la guíe y respalde, permite cerrar la brecha entre un servicio personalizado y uno en el que se tenga que seguir recurriendo al proceso de solicitar cita, acudir a consul- ta y recibir un diagnóstico. Un ejemplo sencillo podría ser nuestros mismos smartwatchs, sumado a muchos otros dispositivos de uso diario como los smartphones. Hoy es posible que el uso de estos dispositivos se convierta en herramientas que faciliten el seguimien- to puntal de lo que comemos, cuándo nos ejercitamos, qué tanto dormimos o cuánto nos estresamos, para contar con una base de datos que al médico o es- pecialista le permitan elaborar un diag- nóstico a través de los datos obtenidos durante los últimos días. En la medida en que las organizaciones de salud pongan su mirada hacia el fu- turo es imposible que pase por alto la necesidad de colocar al consumidor en el centro de todo lo que hacen, ya que solo mejorando los resultados de atención y la experiencia del consumi- dor podrán generar retornos financieros y seguir siendo competitivos al tiempo que satisfacen las necesidades de salud y bienestar de sus pacientes.
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